La verdad es que ese día les metí un buen tute a todos los del grupo, pero ya lo avisé con antelación.
En noviembre compramos los billetes y reservamos el hotel para éste viaje, un sueño que llevaba mucho tiempo intentando cumplir. No sé cuando volveré a Londres. Tal vez nunca o tal vez a finales de éste año ¿Quién sabe?
Sé que me encantaría volver a Londres, e incluso si tuviese dinero, cogería el primer vuelo que hubiese en los próximos 30 minutos y me iba a la capital británica, pero el mundo no es así de fácil.
Veníamos 'cargados' de bolsas de Harrods. Yo decidí no comprar nada, porqué estoy esperando el momento en el que pueda coger mi avión privado para irme un fin de semana de compras a Londres, tal y como suelen hacer los grandes magnates.
Cuando salimos de Harrods, cogimos el metro para irnos hacia la zona de Convent Garden. Ésta era una de las zonas que más ganas tenía de visitar. Es una zona muy con el paso de los años, con tiendas encantadoras y con un ambiente que no había encontrado hasta el momento.
Las tiendas, había de todo, unas que una simple camiseta te color rojo básica te podía costar un ojo de la cara, y otras que tenían un precio bastante bueno y con un estilo único.
Una vez entrabas dentro, habían muchos bares con gente actuando, otros bailando, otros riendo... Típico para un anuncio, pero era todo real.
Después de aquí nos fuimos a un sitio donde nos trasladamos completamente de país ¿Sabes dónde?
Feliz día
Vicent
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